Un Mundo Feliz de Aldous Huxley, es un clásico de la ciencia ficción que muestra un panorama desconcertante de un hipotético mundo futuro, donde el espíritu humano es manipulado hasta su más íntimo deseo. A cambio desaparecía el hambre, las guerras y la pobreza, el gran gobierno central satisfaía todos la necesidades de una población completamente manipulada. Los matrimonios, la familias eran prohibidos, por que no eran necesarios, tampoco tenían opción para elegir cualquier otra cosa que no fuera lo marcada por la gigantesca maquinaria que les había dado vida.
Destacando sobre manera varios conceptos, tomados de las ideas que circulaban en 1932 en la sociedad europea, pero que se transformaron, con el paso del tiempo, una una espacie de profecías.
El primero que me llamó la atención es la compleja maquinaria que da vida a todos y cada uno de los habitantes de esa ciudad. Un coloso sistema que alimenta a los embriones humanos con sangre artificial y permite la manipulación de los fetos de acuerdo a la necesidad del estado. Un detalla dentro del texto nos da una idea de donde consiguió dicha concepto; Llaman, en el libro, a esos tiempos la era de Ford, el que desarrollo una importante estrategia industrial que ha permitido el desarrollo de la humanidad: la fabricación en serie por medico de líneas de producción. En el Mundo Feliz los niños llegan gracias una gran maquinaria que por medio de la placenta artificiales alterara los embriones para dar al sistema la clase de trabajadores que necesita.
Otro detalle importante es la división de la sociedad en clases, estas clases están impuestas desde su nacimiento, en una clonación “primitiva” que propone la novela. Una idea muy tentadora para las clases políticas totalitarias.
La completa libertad sexual es algo que se está imponiendo desde la década de los cincuentas. No se tenía que ser un genio en la década de los cuarentas para poder ver esta comportamiento. Un mundo libre de ataduras donde, como dice, el libro: “Todos son de todos” y es castigado vivir en pareja por mucho tiempo. Los divorcios ya son cosas de todos los días en esta época, en cambio hace treinta años eran raros.
Una de las herramientas que tiene el sistema totalitario del mundo feliz para controlar a la población es el Soma, una drogo. Una de las formas de distracción más fuerte que existe es alterar la conciencia por olvidarse de los problemas. Dichas drogas son proporcionadas por el estado y están manipulados para usarlas en los primeros momentos que tengan alguna imagen o problema que los altere. Aunque Huxley se basó en el alcohol para llegar a ese concepto, en la actualidad las drogas se han vuelto un escape de la realidad peligrosa en la que vivimos, y un medio para la desestabilización de la sociedad.
Las clases sociales están divididas de acuerdo a el acondicionamiento intelectual que les proporciono el Centro de Incubación y Acondicionamiento de la Central de Londres. Son seis, desde los alfa hasta los épsilon. Van en orden desde los líderes hasta los obreros no calificados. Pero el acondicionamiento desde la etapa temprana los obliga a aceptar su condición y a separarse unos de otros. El acondicionamiento psicológico de los niños fue algo muy frecuente el los gobiernos totalitarios, donde el culto a la personalidad se les enseña a los niños desde preescolar, haciendo ver a los lideres como dioses de mala calidad.
El nombre de los dos personajes centrarles es Bernardo Marx y Lenina Crown, lo que nos dice que el régimen totalitario de un mundo Feliz es de corte comunista. En aquellos tiempos la única información que surgía de los países comunista eran alabo al sistema totalitario. Nada se sabía de las purgas ni el acoso a la población. Huxley se imagino ese puente intermedio entre los dos sistemas: un sistema de capitalismo con un gobierno comunista. Ese estrategia política se ha cumplido actualmente, en países de Asia como China.
Para los protagonistas no existe un gran enemigo contra el cual luchar, no tienen un Gran Hermano que lo vigila, los castiga y los ama. Sino sólo un sistema en el cual fueron acondicionados desde se concepción, y en el que creen. Los problemas surgen por pequeñas cuestiones de inadaptación por problemas en la manipulación de los fetos durante su gestación, y para los cuales también tiene lugar el sistema.
Tampoco existían ancianos. Las personas que llegaban al final de su vida productiva eran sacrificados para no tener que batallar con ancianos.
En la segunda parte del libro ese mundo, manipulado por el mismo sistema, es enfrentado con un mundo primitivo en una reservación indígena, donde los seres humanos son libres para vivir en contacto con la naturaleza. Este choque se manifiesta cuando Bernardo y Lenina encuentran a una mujer, Linda, y un niño blanco, John, que no encajan es la sociedad primitiva. Linda se perdió embarazada en el terreno de la aldea y nunca pudo salir.
Linda es sacarificada por el hecho de que su cuerpo se encontraba muy alterado. Pero es John, el niño salvaje el que fascina a esa sociedad, como si representara el lado salvaje que todos tenían y que se manifestaba es esa incomodidad social que era acallada por las drogas.
Al final Bernardo y Diego, por su problemas pequeños de adaptación, son enviados a sitios apartados donde sus inquietudes podrían ser aprovechadas en la investigación. El joven salvaje es colocado en una isla rocosa, donde cree apartado para llevar a cabo los rituales de la tribu pero sigue siendo acosado por esa sociedad que lo siguen para verlo realizar sus ceremonias salvajes. Juon ante este acoso termina suicidadndose.
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