Dentro de nuestra manera de expresarnos se considera que las palabra son las más importante en nuestra comunicación, pero se ha demostrado recientemente que el lenguaje corporal tiene una parte muy importante en el mensaje que deseamos trasmitir. Se considera que el cuerpo trasmite el 80 % del mensaje, el otro 20 % son las palabras.
En una serie de pruebas científicas, un doctor: Paul Ekman, quiso encontrar si existían señales corporales que fueran universalmente entendidas por todos los humanos. Para esto le pidió a nativos de una tribu “primitiva” de Nueva Guinea y Japón, hicieran los gestos para determinadas emociones, y los grabó.
Después comparó los gestos con poblaciones occidentales. Encontró que existen 7 gestos que son universales. Personas en todo el mundo podrían identificar cada gesto y atribuirle una emoción.
Estos 7 gestos son: Felicidad, tristeza, ira, miedo, sorpresa, desdén y asco. Aunque encontró cerca de 3 mil gestos que se manifiestan consciente o inconscientemente.
Estudios posteriores demostraron que estos siete gestos son innatos: que entender dichos gestos está grabado en nuestros genes. En nuestra evolución el lenguaje fue uno de los últimos atributos en aparecer para definirnos como especie. Antes, nuestros antepasados, sólo tenían los gestos como única forma de comunicación.
El interpretar estos gestos para entender el mensaje que dan es indispensable para sobrevivir como especie, y en nuestra interacción social. Muchos evolucionistas consideran que fue la interacción social de grandes grupos de primates, lo que permitió evolucionar la inteligencia humana.
Al tener un pasado muy remoto en nuestra evolución, los siete gestos básicos no están controlados por nuestro consciente. Por lo tanto siempre que una persona se siente en alguna forma presionada, sus gestos expresaran la verdadera emoción que siente. Por ejemplo las manos siempre demuestran nuestra emoción aunque tratemos de demostrar otra emoción con las palabras o los gestos. Cuento la persona está enojada, sus manos están lista para la pelea, rígidas y al frente; si tienen miedo las esconde; si se siente inseguro las frota una contra otra.
Actualmente se utilizan los micros expresiones para analizar a una persona. En estos una persona que trata de demostrar una emoción que no siente deja escapar gestos que demuestran los verdaderos sentimientos. Pero estos se presentan en fracciones de segundos y se necesita mucha experiencia para poder interpretarlos adecuadamente, o conocer muy bien a la persona que se analiza.
Cuanto nos sorprenden o estamos bajo cierta presión surgen las micro expresiones. En cuando un pensamiento, que sabemos que es vedada, va contra lo que deseamos decir, estos es cuando estamos a punto de decir una mentira. Las micro expresiones son el resultado externo de la duda en nuestro subconsciente.
De hecho estamos programados por la naturaleza de respaldar nuestras palabras con gestos, cuando no es así surge el conflicto interno y es como se puede detectar una mentira.
Las micro expresiones, aunque es muy interesante y se pueden usar para fines prácticos en la vida cotidiana, es muy inexacto para poder encontrar una mentira en una persona normal o usarlos con fines judiciales.
El Polígrafo, detector de mentiras, es la técnica más segura para asuntos criminales. Pero se están haciendo estudios para encontrar otros métodos para encontrar esa verdad oculta.
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